Días atrás Gustavo Bonecco realizó un vivo de Facebook desde Newcom MDQ con la titular de Coach Deportivo, Belén Urbán en los que se abordaron temas relacionados a la importancia de la motivación en los jugadores y en los equipos para el mejoramiento del juego.
F.O.D.A fue uno de los términos de los que habló la couch. Las siglas se refieren a Fortaleza, Oportunidades, Debilidades y Amenazas. “Se puede aplicar al jugador y al equipo, es un análisis que nos sirve como jugadores, como técnico, como equipo; cuando se hace el análisis aparecen herramientas y hay claridad”, explicó Belén.
Para la coach es muy importante la comunicación, incluso aquella que se hace a través del gesto. “La expresión corporal muchas veces comunica más que la palabra, las posturas, los gestos, las miradas; alguien que entra a la cancha con los hombros caídos y mirando para abajo no es igual al que entra mirando hacia adelante, sacando pecho, que se muestra listo para enfrentar lo que se viene”, agregó.
En esa línea, el cuerpo comunica al otro, pero también a uno mismo.
Belén también se refirió a la importancia de dar y darse aliento, las palmadas, reforzarse con un grito cuando se festeja el punto. Todo motiva y libera energía.
Para el caso en el que se produce un error o se genera conflicto, Belén destacó que es importante acompañar, tocar al compañero, tener la intención de levantarlo. Todo son estrategias para revertir los momentos adversos.
Acerca de la pregunta de Bonecco sobre qué pasa con el jugador que siente que no puede y espera que lo saquen del partido, Belén respondió que eso le pasa ante distintas situaciones.
Anclaje es la herramienta que se emplea en esos casos, eso es llevar al jugador al momento presente y lo que puede controlar. “Si se concentra en lo que hace mal, entonces anclaje se tiene que practicar en los entrenamientos; hay acciones motrices, algo que se genere a través del tacto, tocarse el cuerpo, atarse los cordones, un ritual como el de los tenistas, que los conecta con el presente”, apuntó la especialista.
“Pensar y decir en voz alta una emoción positiva, una frase como “vamos!” o lo que uno quiera, algunos cantan una estrofa, puede ser un diálogo expresado o interno”, aseguró la coach.
En otra instancia, visualizar lo que viene, a dónde tirar la pelota, focalizar en lo que se va a lograr y bien hecho, ya sea en el saque o en la recepción.
“Se le explica al jugador que tiene el control del momento, ya sea en defensa como en el ataque, solo cuando está la pelota en sus manos. Luego no se puede controlar, el partido lo maneja el juego”, dijo Belén.
La idea es sacar la carga del jugador y luego reforzar el “bien hecho”, eso aumenta la autoestima y da seguridad en el lugar que esté.
La coach destacó que el jugador disfruta cuando sabe que tiene dominio del juego, si no queda en el pensamiento de que el error está mal. “En newcom jugamos con el error, forma parte del juego, y va a haber error porque si no no hay puntos. Pero hay que distinguir el error y si sigue sucediendo es que no lo podemos ver”, explicó.
La especialista invitó a pensar que el equipo es un engranaje, “si todas las pelotas entran atrás del 6, hay que ver a quién está cubriendo él, no culpar a través del error, si no ver cómo lo resolvemos, hay miles de formas, la idea es ir transformando todo el tiempo”, aseguró.
Permitir y aceptar el error baja la Sobre Exigencia, aunque se trate siempre de hacer lo mejor posible, a veces no sale. En oportunidades quien está en el banco puede entrar al juego para refrescar y dar una ayuda al equipo.
Con relación al ánimo del adulto mayor cuando se incurre en malas jugadas, Belén explicó: “ya vivieron mucho, ya arriesgaron, pasaron por muchas etapas y la en cancha se refleja como un instinto animal, de supervivencia; cuando hay presión hay una adrenalina y para el cuerpo es como si se jugara por la vida, no quiere perder”.
Además cuando aparece un error puede reforzarse con el recuerdo de situaciones vividas en las que se perdió o se fracasó.
“El que sale enseguida es el que en su vida se tuvo que levantar por voluntad propia mil veces; también pasa con un buen número de mujeres que siempre fueron detrás del hombre, más sumisas y no se animaron a comunicar muchas cosas, entonces en el momento del error es ver cómo afrontamos otros hechos en la vida”, mencionó la coach y agregó que en los jugadores que se bloquean hay que trabajar su autoestima, ver cómo reaccionó en situaciones adversas.
Se explicó que se generan cosas de transformación para el jugador porque cuando supera adversidades, “aveces no es una pelota, sino un recuerdo que viene de años”.
¿Qué pasa cuándo un jugador se enoja y se lleva puesto al equipo o al partido? preguntó Bonecco y Belén respondió que eso pasa muchas veces con jugadores que son fundamentales, líderes natos que por lo general no se permiten el error.
“Piensa que él está perdiendo, no el equipo y hay que explicarle que si él está mal se cae el conjunto porque suelen cargarse el equipo”, dijo Belén y remarcó que en esos casos debe pedir el cambio y trabajar en su anclaje.
En otro segmento de la charla se destacó que es importante que el técnico tenga adentro de la cancha alguien que sea sus ojos con quien pueda comunicarse de forma rápida.
“Se debe decir con claridad qué están haciendo bien, qué incorporar y qué hay que modificar; hay momentos claves para dirigir y momentos claves para motivar”, sostuvo Belén Urbán.
La coach trabaja con la cabeza del equipo, con el líder o el profe para que haya un trabajo fluido, se hacen ejercicios de dinámicas grupales y reflexiones individuales.